Me gusta viajar ligera de equipaje, aunque no quiero renunciar a llevar encima todos ‘mis indispensables’ cuando me dispongo a explorar las ciudades, campos y playas del globo terráqueo. Me refiero a llevar básicamente algo de dinero en efectivo, tarjeta de crédito, pasaporte, smarthphone y cámara de fotos de lentes intercambiables.
En mis recientes road trip por Qatar, Argentina y Estados Unidos no he tenido que renunciar a ninguno de estos must gracias al tamaño (121 mm x 83 mm x 47,4 mm) y peso (448 gramos, ¡batería incluida!) de la cámara Fujifilm X-T100, que me parecen ideales para convertirla en ‘esa cámara’ que siempre te puedes llevar a todas partes.
Cuando alguien me pregunta: “me quiero comprar una cámara, ¿cuál me recomiendas?”, siempre les respondo a la gallega diciéndoles: “¿para qué la vas a usar?”.
Hago esto porque la mayoría tienen en mente adquirir una réflex, con dos o tres objetivos, meterlo todo en una bolsa molona, impermeable y, a la vez, voluminosa, que al final, casi nunca sacarán de casa debido a su peso y tamaño. Poco a poco les dará pereza llevarla encima. Sé de lo que hablo.
Por ello, Fujifilm X-T100 es por su liviandad una buena cámara sin espejo que recomendar para aquellos/as que les guste viajar ligero/a de equipaje y hacer fotos y vídeos allá donde van; si eres así, sin duda esta es tu cámara. Además, la batería ¡dura más de 7 horas! Y su relación calidad – precio creo que es muy adecuada.
La cámara Fujifilm X-T100 más la óptica Fujinon XF23mmF2 me parecen una opción perfecta para la fotografía urbana, documental y de viaje. Sin duda, tras haber trabajado como fotógrafa, viajando por el mundo cargando una cámara reflex y 3 objetivos, uno de ellos de 500mm, lo que menos me apetece es emplear una cámara enorme en mis viajes de ocio, que además llame mucho la atención y espante a la gente cuando justo quiero pasar desapercibida para captar la esencia de los momentos que me voy encontrando.
Para este fin, Fujifilm X-T100 tiene una pantalla táctil desde la que puedes enfocar y disparar, y su sistema de articulación en tres ejes y la óptica de XF23mmF2 me ha permitido utilizar esta cámara como si de formato medio se tratara, poniéndola a la altura de la cintura; esto y tamaño de la cámara creo que facilitan el trabajo porque no llamas la atención, respeta el parecer invisible entre medio de la gente y puedes pasar desapercibido.
Y por último y no menos importante, la estética de la cámara. Su diseño retro exterior es de lo más ‘top’. Por dentro, Fujifilm nos ofrece uno de los mejores sensores para capturar imágenes con excelente definición, colores vibrantes y apenas ruido en sensibilidades altas. Siendo una cámara de gama amateur, da buenos resultados, te lo pone fácil para sacar buenas fotos de paisajes, retratos, bodegones, etc.
Luego, con la conectividad WiFi realizas el emparejamiento automático de Fujifilm X-T100 con el smarthphone y a través de la app Fujifilm Camera Remote para iOS y Android se puede realizar la transferencia inalámbrica instantánea de fotografías a nuestro dispositivo para publicarlas en las redes sociales. Trabajando dentro del box del Team Estrella Galicia 0,0 en el Mundial de MotoGP, el poder publicar las fotos en RRSS con premura, es algo primordial y que la cámara Fujifilm X-T100 te permite realizar.